Aceite de Menta Mentha piperita
El aceite de Menta es uno de los grandes clásicos de los aceites esenciales. Su historia se remonta al antiguo Egipto y al Imperio romano, donde se utilizaba para promover el bienestar digestivo así como en baños y rituales.
El aroma de la Menta es inconfundible: fresco, vigorizante y revitalizante. Sus propiedades lo convierten en una elección popular para enfrentar la fatiga y revitalizar la mente. Así como para coadyuvar a abrir las vías respiratorias y estimular la concentración.
Su versatilidad y fragancia agradable lo convierten en un favorito tanto para la relajación como para la vitalidad y el disfrute sensorial. El aceite esencial de Menta es un tesoro aromático que combina la herencia cultural con beneficios contemporáneos para la mente, el cuerpo y el espíritu.
Usos
La menta se utiliza comúnmente para abrir las vías respiratorias. Puedes inhalarla directamente del frasco o añadir unas gotas a un difusor.
Agregar una gota de aceite de menta a un vaso de agua y hacer gárgaras puede ayudar a refrescar el aliento y ayudar a la buena digestón.
Aplica una dilución de aceite de menta en las sienes y la frente puede ayudar a apaciguar sensaciones de cansancio mental.
Precauciones
Posible sensibilidad de la piel. Mantén fuera del alcance de los niños. Si estás embarazada, amamantando o bajo cuidado médico, consulta a tu médico. Evita el contacto con los ojos, oídos internos y zonas sensibles.